¡Hoy es el día! El viejo verde de Navidad, alias Papá Noel (Joulupukki en finlandés), viene hoy a nuestras casas. A estas horas ya habrá iniciado su largo viaje desde Korvatunturi. De hecho, ya habrá repartido los primeros regalos en algunas zonas de mundo.
Vive en Korvatunturi, una pequeña montaña, precisamente es donde él vive con su mujer, los renos y los elfos. Está en la Laponia finlandesa, muy cerca de la frontera con Rusia. Su casa está rodeada por bosques y es el lugar ideal para escuchar los deseos de la gente.
Alguno dirá que ha ido a ver a Santa y no ha tenido que ir tan lejos. Y es verdad. Él siempre está en su oficina en el Círculo Polar Ártico para recibir allí a la gente. Si intentas ir a Korvatunturi a ver su casa, buena suerte, está muy escondida. Es uno de los grandes secretos que él esconde.
Inicio de su viaje
Joulupukki empezó ya ayer su viaje. Cada año suele salir a las siete de la tarde (que conste, esto no me lo estoy inventando, esto es verificable). Por lógica, los primeros hogares que visita son los de Nueva Zelanda, algunas islas del Pacífico y la parte más oriental de Rusia, donde son 12 horas más que en la zona de Meridiano de Greenwich (Londres, Portugal…).
Parte con los regalos para los niños y sus inseparables renos. Uno de ellos es Rudolph, el líder del grupo que distinguimos por su llamativa nariz roja. También lo conocemos como Petteri Punakuono en Finlandia. Su luminosa nariz le sirve a Joulupukki para guiarse en la oscura noche. Los otros renos se llaman Dasher, Dancer, Prancer, Comet, Cupid, Donner y Blitzen.
LEER MÁS | Lista de Spotify de villancicos finlandeses
Cuando ha acabado con los últimos países, que también por lógica son los países con 11 horas (donde hay 12 menos no vive nadie) menos que en Londres (por ejemplo, en Samoa Americana, en el Pacífico). Entonces, empieza de nuevo la cuenta atrás para el año que viene.
En nuestro Vlog del año pasado, podéis ver cómo pasé la Navidad de 2012, en el segundo capítulo:
Que tengáis una feliz y tranquila Navidad todos y que recibáis muchos regalitos del «gordo» 🙂 .