El Helsinki Jalkapalloklubi (abreviado como HJK) ha hecho historia una vez más. El jueves se clasificó para la fase de grupos de la Europa League, cosa que ningún conjunto finlandés no había conseguido hasta la fecha.
Lo hizo tras un apasionante partido ante el Rapid Wien, de Austria. Los de Viena dieron mucha caña, pero la pegada del HJK fue crucial. Y tampoco hay que olvidar a Toni Doblas, el nuevo fichaje para los blanquiazules, que salvó en algunas ocasiones a su equipo.
En el partido de ida en el Sonera Stadium cogimos una ligera ventaja. Logramos una victoria por dos a uno, con goles de Robin Lod (zambombazo desde fuera del área por toda la escuadra) y Mika Väyrynen, y Schaub para el Rapid.
Vamos a hacer un repaso de cómo fue el encuentro de vuelta. Después ya pasaremos a ver cómo ha quedado el sorteo para la liguilla.
Rapid Wien 3 – 3 HJK
El partido ya de inicio se preveía complicado. En el primer minuto parecía que jugábamos contra locomotoras. Empezaron enchufadísimos, el gol estaba prácticamente cantado. A los nueve minutos, Beric se adentra en el área, llega hasta la línea de fondo, la pone por bajo para Schaub, quien la pega de primeras y bate a Doblas.
Apenas nos dio tiempo a reaccionar cuando llegó el segundo. De nuevo Schaub recibe el esférico, y desde el borde del área grande envía un misil teledirigido hacia la escuadra. No podía hacer nada Doblas.
Todavía había esperanzas. Un gol ponía el empate en el global. Llega el minuto 14, y todavía teníamos el susto en el cuerpo tras los dos tantos de los locales. Robin Lod se disponía a sacar desde la esquina. Va corto, pero Teemu Tainio se alza en el Ernst Happel para rematar… La rechaza el portero, pero ahí estaba Kandji, donde tenía que estar, para marcar ese gol de pillo que dio alas al HJK.
El marcador se mantuvo sin cambios durante más de una hora. El control parecía que lo tenía el Rapid, pero aunque solo en contadas ocasiones daba sensación de peligro. En el minuto 75, falta para los finlandeses en perpendicular con la portería defendida por el Rapid. Hay algunos metros con la frontal, pero eso no es un obstáculo. Ahí estaban Robin Lod y Nikolai Aleksanteri Alho. Precisamente es Alho quien empieza a coger carrera, la golpea… ¡¡¡y golazo!!! ¡El balón supera la barrera de manera prodigiosa, describe la curva más bella que he visto en mi vida, bota justo antes de entrar y acaricia la red! Entonces Finlandia se viene abajo, Europa se rinde ante el gol más importante en la vida del futbolista.
La remontada todavía no tenía ese toque mágico, el que le daba el carácter histórico. A poco del final, vamos a la contra en la búsqueda de la épica. Tiene la pelota Savage, quien llega al área, recibe un abrazo de bestia de Pavelic y el árbitro no se equivoca: penalti. El africano fue el encargado de lanzarlo. Tenía la presión de cinco millones de finlandeses. Porque ya no era el club de fútbol de Helsinki, era el club de todo Finlandia. Se ganó el sueldo. Savage convertía el partido en un sueño para la ciudad, para el país.
Ya no nos importaba nada. Pasase lo que pasase en los seis minutos restantes ya lo habían hecho. Wydra puso en el último minuto el tercero para su conjunto tras rematar el esférico desde más de 20 metros. La suerte estuvo de su lado, pero era tarde. Se estrelló en el palo, pero por desgracia se metió dentro tras tocar por detrás en Doblas. Nos era igual. El árbitro pitó el final, y ya era oficial: el HJK estaba en la fase de grupos de la Europa League.
Era un momento de euforia. Los jugadores celebraron este gran triunfo en el vestuario como si no hubiese mañana. Tainio fue el primero en rociar a sus compañeros en champán y dar un trago. La alegría se nota en sus caras. El club ha facilitado en YouTube el vídeo del festejo, disfrutad:
El contento ya nadie nos lo quita. Pase lo que pase en los próximos partidos seguiremos entusiasmados por lo que ha hecho nuestro equipo.
El sorteo de la Europa League
La suerte nos sonríe. Nos ha tocado uno de los grupos más flojos. Tenemos al FC Copenhague, el Club Brujas y el FC Torino como rivales, pero no debemos confiarnos: somos el rival más débil, y eso es un hecho.
Si había alguna posibilidad de pasar, sin duda la tenemos con estos equipos. El HJK luchó muy fuerte, y no puso las cosas nada fáciles a los otros. No le pedimos que pasara a la siguiente ronda. No lo logró, pero peleó a lo bestia.
Eso sí, recordad que nosotros tenemos algo que ellos no poseen: el sisu, ese espíritu finlandés que nos puede dar un plus en condiciones adversas. Además, tenemos el ejemplo de Costa Rica en el Mundial, que se cargaron a selecciones todopoderosas como Italia o Uruguay. ¿Por qué no podremos hacer lo mismo pronto?
Podéis poner en los comentarios cómo habéis vivido el partido que, sin dudas, fue apasionante. Para mí, desde luego, fue un gustazo, a pesar del sufrimiento iniciar 😉.
No soy mucho de fútbol, la verdad, prefiero la F1 😛
No soy de futbol. Pero me encantan los rubios! Besotes!
Como a mí no me encantan ni los rubios, ni los morenos, ni los que sean en sexo iguales, futbolisticamente hablando: ¡¡¡ bien por los fineses!!!