El fin del roaming… y de buscar Wi-Fi como loco

15 de junio de 2017. Es el día D para quienes visitamos a menudo Finlandia, u otros países europeos. Es el fin de una era, el fin del roaming. Los bebés que nazcan a partir de esa fecha ya no conocerán qué es viajar por Europa sin ir buscando Wi-Fi de forma desesperada o navegar por Internet sin dejarte un riñón y parte del otro.

Sí, que al fin le demos la patada al roaming es, aparentemente, buena noticia. Pero, a partir de ahora, también empezará a surgir esa nostalgia por aquellos tiempos en los que hablar por WhatsApp era más complicado.

Tengo que reconocerlo. A partir de ahora, navegar por Internet va a ser tremendamente fácil desde Finlandia. Ya sabrás que voy cada vez que tengo la ocasión, siempre de vacaciones. Y, hasta el verano de 2017, conectarse era todo un suplicio.

Hasta entonces, para poder conectarme 10 minutos con el móvil a veces tenía que quedarme fuera de una biblioteca -no iba a entrar solo para pillar Wi-Fi con el móvil, suena bastante poco finlandés. En verano aún sería comprensible… pero en invierno, un poco suicida. Verás, las pantallas de los smartphones tienen la gran desventaja de que apenas las puedes manejar con guantes. Así que no hay otro remedio. A temperaturas por debajo de cero, los dedos se resienten, se te van congelando y escribir se hace más dificultoso.

Realmente, aunque se diga que en Finlandia es fácil conseguir Internet porque hay redes gratis por todo, esto se reduce básicamente a comercios -sobre todo cadenas- y a grandes ciudades, como es el caso de Helsinki. Pero luego te vas a un pueblo o una urbe más pequeña y no hay manera. Eso sí, cuando lo encuentras, notas cómo se te abre una ventana a medio mundo. La alegría es notoria.

Estos momentos, ahora, se perderán. La búsqueda del vecino generoso o el Wi-Fi del ayuntamiento. Los Erasmus tampoco tendrán que comprar una tarjeta prepago. Todo en beneficio del progreso, de la comodidad. Podremos enviar un selfie desde dentro de un bosque… ¡sin pasar por caja! Suena a tontería, es normal. Es como cuando nos decían que podríamos ver la tele en color. Estamos en esa fase. «¿Estamos locos? ¿Veremos si el presentador de las noticias tiene canas?». Ahora, ya no solo sabemos cómo son los ojos del meteorólogo, sino que le podemos ver el iris en HD.

Datos esenciales del fin del roaming

– Del acuerdo, según eldiario.es, se beneficiarán los países de la Unión Europea. También se sumarán Noruega, Islandia y Liechtenstein en Movistar, Orange y Vodafone. En esta última compañía también incluirán EEUU, Suiza, Albania y Turquía.

– No te podrán cobrar ni un euro extra, si no te pasas de los límites establecidos.

– Como máximo, podrás llamar, enviar SMS y navegar por Internet de forma libre por Europa durante cuatro meses al año. La excepción: Erasmus y trabajos temporales en el extranjero.

– Si estás más de cuatro meses sin que entres en las excepciones, te cobrarán la llamada a 3,2 céntimos el minuto, un céntimo el SMS y 7,7 euros por GB (el precio bajará hasta 2,5 euros por GB en 2022). A esto hay que sumarle el IVA.

– Según advertía la organización de consumidores Facua en el programa Más vale tarde -La Sexta-, las compañías podrían subir sus precios para compensar las pérdidas que puedan sufrir.

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A los amigos mexicanos, argentinos y latinoamericanos en general, vosotros aún tendréis que apañaros con las prácticas que para los europeos ya son «de antaño». Por Helsinki aún lo tendréis fácil, y en general en las grandes ciudades. Pero deberéis buscaros la vida en pueblos, carreteras o bosques. ¡Que la suerte os acompañe!

Ahora, la próxima vez que vaya a Finlandia también podré enviar fotos por Twitter al instante y podrás admirar el país al momento. Sí, se pierde lo de la búsqueda de Wi-Fi, pero esta nueva época promete ser fantástica en un momento en el que estar conectado y la inmediatez es fundamental. A ti, ¿qué te parece que sea el fin del roaming? 😀