Primero de todo, ¿Mallorca? ¿Qué tiene Mallorca para escribir sobre fiestas del centenariazo finlandés? Pues, por si no lo sabías, es donde he nacido. Dicho esto, ¿no te parece increíble que una isla perdida en el Mediterráneo celebre acontecimientos por el estilo?
Te explico entonces qué es lo que se va a hacer. Desde el 30 de septiembre hasta el 7 de octubre, se celebra en Mallorca la semana de la música finlandesa. Se organizarán varios conciertos que, mayormente, girarán en torno a las obras del compositor Jean Sibelius. Es decir, más nuestro, imposible.
Ya en Crónica Balear, digital donde ahora trabajo, adelantamos los detalles de esta semana fantástica. El Conservatorio de Palma inaugura los actos con un concierto el 30 de septiembre. Del 2 al 4 de octubre hay clases maestras de la mano del rector honorífico de la Academia Sibelius, Gustav Djupsjöbacka. Después, concierto en Son Marroig (Deià) el 5 de octubre, al día siguiente en la Fundación Bartolomé March, que a la vez acogerá el cierre de esta semana el 7 de octubre.
Como ves, son siete días con actividad a tope. Y, espera, porque aún no has escuchado lo mejor. Es gratis. Sí, sí, gratis. Se paga un total de cero euros. Más razón para celebrar los 100 años desde la independencia.
Todo esto es gracias a un cantante finlandés, ya retirado, que vive en Mallorca. Este es Martti Wallén. Él presentó la propuesta a Alfredo Oyágüez, el director de la Orquesta Sinfónica del Conservatorio de Palma. Él la aceptó y se puso manos a la obra. En su época en activo, hizo ya varios eventos por el estilo en Helsinki o Estocolmo, así que ya tiene cierto recorrido en este tema.
Sibelius, el centro de los conciertos
Pero hablemos ya del compositor central de la semana, Sibelius. Ya te hemos contado mucho sobre él en el blog, pero nunca está de más conocer qué dicen los expertos. «Su obra está enmarcada dentro de la corriente nacionalista, pero con unas características muy específicas, más inclinadas hacia el poema sinfónico que a la sinfonía más tradicional», nos cuenta Oyágüez.
Y ojo, que aún se moja mucho más: «Podríamos incluso, de una manera un poco libre y muy personal, bautizarle como el padre de la banda sonora, pues su obra es muy paisajística desde el punto de vista pictórico». Una visión que culmina diciendo que es «sin duda uno de los más grandes sinfonistas que hay en Escandinavia».
Entre las obras que sonarán de Sibelius, destaca el himno Finlandia. A modo de curiosidad, Martti Wallén cuenta que Sibelius nunca quiso que se cantara. «Fue una idea de gente que quería cantarlo», agrega.
Conozcamos también los nombres de la gente que llegará desde Finlandia para interpretar las obras. Todos ellos son bastante conocidos en el norte de Europa. Entre ellos, están el violinista Einari Liikkanen, el soprano Hedvig Paulig o el bajo-barítono Jouni Kokora. Además, el compositor Kalevi Olli hizo arreglos para algunos temas que se escucharán.
No solo tocarán cosas de Sibelius, sino que también se unirán a su manera los compositores Yrjö Kilpinen, Leevi Madetoja -fue alumno de Sibelius-, Oskar Merikanto, Erkki Melartin y Toivo Kuula. ¿No les conocías? Tranquilo, yo tampoco.
Clases del rector de la Academia Sibelius
Después, es interesante ver que también harán esas clases maestras en Palma. El director de la Orquesta Sinfónica sostiene que es una oportunidad para que la gente aprenda un repertorio desconocido. Igualmente, les servirá para cantar en un idioma que no habla. Es decir, actuar.
Si estás en Mallorca estos días, tienes que ir. Oyágüez lo argumentaba cuando hablaba con él diciendo que «el arte no tiene nacionalidad, la música es universal y todo lo que tiene calidad, tiene que tener interés a cualquier persona que tenga un poco de sensibilidad y sentido común«.
En este sentido, Wallén te recomienda que te empapes antes de lo que vas a escuchar. Leer sobre los compositores, buscar en YouTube y ponerte los auriculares. Para así hacerte ya a la idea de lo que tendrás.
A mí ya me alegra que en Mallorca tengamos cosas así, sobre todo porque celebramos el centenario de Finlandia. Si pudieras, ¿irías a los conciertos? Yo ya te digo que sí, es más, asistiré 😉 .