Este vlog de hoy es histórico. Es la primera vez que estando de vacaciones en Finlandia nos marchamos antes de tiempo. Pero tranquilos, solo será para ir un par de días a Tallin (Estonia).
Muchos finlandeses ya sabrán a qué hemos ido a Tallin. Aunque yo no beba alcohol, mis acompañantes sí, por lo que fuimos a comprarlo allí, ya que es más barato. Es un clásico. Pero también debíamos aprovechar la ocasión para conocer la ciudad.
La diversión de este viaje de día y medio empezó nada más subirnos al barco. Aunque el trayecto dura solo dos horas y media, había bastante animación: un concierto, un taller para críos y, lo más importante, el bingo.
Después de amarrar en el puerto visitamos la ciudad, concretamente su famoso casco histórico. Tras conocer un poco Tallin llegael turno de la compra de alcohol. Y vemos que, aunque han subido los precios por un aumento de los impuestos, los finlandeses siguen animándose a adquirir cerveza y vino. Lo mejor será verlo en el vídeo para comprobarlo.
Después de ver el vídeo, qué mejor que descubrir Tallin con un enfoque distinto. Y para eso está nuestra galería de fotos con una selección de algunas de las imágenes tomadas en este viaje exprés al país vecino.
Más tarde o más temprano volveremos a Estonia. Diría que más bien será pronto, porque me tocó un viaje a Tallin de un día en una especie de juego que metieron en el mismo bingo. No me queda más remedio que regresar en los próximos seis meses, antes de que caduque.
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Ahora el siguiente capítulo que nos espera será sobre Tampere, otra ciudad inédita hasta ahora en los vlogs. Mientras esperamos a que se publique, ¿por qué no nos dejas tus impresiones sobre este capítulo en Estonia? 😉
Lo del Museo de la KGB en el hotel da para una entrada en el blog.
Desde luego que sería interesante! El problema es que no llegamos a entrar, por eso se ha quedado como un mero apunte en el vídeo. Allí solo se podía pasar con un guía y en horas determinadas, cuando se hacen recorridos en inglés, estonio o finlandés. Y claro, también hay que pagar: 11 euros!
Si tienes interés, te hago una pequeña introducción de lo que me explicaron. Hace ya varias décadas el KGB realizó operaciones precisamente en este hotel. Concretamente, espiaron a algunos de sus clientes poniendo micrófonos en sus habitaciones.
Saludos!
Vale, entonces el museo va de un suceso concreto de la KGB, específicamente en ese hotel. SI LO QUE HICIERON FUE ESPIAR A LOS CLIENTES pues no vale la pena el museo AHORA sería diferente si hubieran tomado el hotel como centro de operaciones en ese país, una central espía encubierta, eso hubiera sido más emocionante ¡imaginad los turistas inocentes alojándose en una central extranjera de la KGB! (mi imaginación vuela).
Tranquilo, no vale la pena entonces el visitarlo, ¡feliz tarde por allá (aquí apenas amanece)!
My bad, parece que también había un centro de escucha en la planta 23, era como un punto estratégico de la URSS en Estonia. He encontrado esto que lo explica de forma más amplia: https://www.youtube.com/watch?v=SuPv3zOGcw8
http://viajes.elmundo.es/2013/05/14/europa/1368544036.html
Vamos, que sí que era ciertamente relevante.
Saludos!
Y por si quedaba alguna duda:
«Así el Viru, con 1.000 empleados para un máximo de 800 huéspedes y servicios de hostelería inimaginables en la época era un señuelo perfecto para visitar la pequeña pero estratégica Estonia, un país a sólo 80 kilómetros de Helsinki que ejercía, muy a su pesar, de frontera Oeste del gigante soviético. El hotel lo tenía todo: hasta un cabaret donde se podían ver a mujeres medio desnudas (la mitad espías)…»
Sí, sí, lo del cabaret de espías ya es demasiado. En fin, ¡como si no fuera suficiente con todo el aparato que montaron!