Así de adaptada está Tallin para el turista finlandés

No es para nada exagerado decir que Estonia y Finlandia son países hermanos. Las relaciones entre ambos países son excelentes y la de sus ciudadanos, bueno, ni te cuento. Aun así resulta sorprendente lo adaptada que está la ciudad de Tallin para acoger al turista finlandés.

Casi podríamos decir que los finlandeses se sienten como en casa. Si no fuera porque el idioma que escuchan por las calles es ligeramente distinto al suyo, casi podrían jurar que no han cambiado de país.

Ya sabrás que Estonia es claramente el destino vacacional favorito de los finlandeses, con 560.000 viajes en el primer cuatrimestre de 2018 según el centro de estadística finlandés. Puede que no te sorprenda este dato, pues ya te dijimos que era de sus opciones preferidas cuando explicamos los motivos por los cuales a los finlandeses les encanta Tailandia.

Nada más cruzar la conocida Puerta de Viru, entrada al casco antiguo de Tallin, empiezas a extrañarte por la presencia de una bandera que te resulta familiar. Una con el fondo blanco y una cruz azul. Sí, la finlandesa. Verás unas cuantas colgadas en las fachadas, pero curiosamente la de Estonia brilla por su ausencia en el trayecto hasta el Ayuntamiento. O por lo menos pasa desapercibida.

LEER MÁS | Vlog: De aventuras por Tallin, la tienda de cerveza de los finlandeses

Los mismos locales que encontrarás en la parte con mayor afluencia tienen cierto aire finlandés. Hay un bar que solo con el nombre se delata: Helsinki. Después también te darás cuenta de que muchos de estos establecimientos siguen siempre los acontecimientos deportivos finlandeses. Me acuerdo de que en uno de ellos lucía la camisa de Petteri Koponen con el Barça de baloncesto. ¡Estaba firmada y todo! Y, por supuesto, siempre que la selección de hockey jugaba no faltaba un solo bar que no tuviera el partido puesto en las teles.

¿Quieres saber qué nos encontramos en los pubs con karaoke? ¿Lo adivinas? Ni siquiera estos locales han querido desaprovechar la oportunidad de atraer al turista finlandés. También tienen todo un catálogo con canciones finlandesas. No me he molestado en echarles un vistazo para evitar la tentación y la estampida de clientes marchándose, pero supongo que estarían los temas más comerciales y clásicos. No te aconsejo que vayas si hay partido de hockey.

Las cadenas finlandesas, presentes en Tallin

Después, también es destacable la presencia de muchas cadenas finlandesas en Tallin. Por ejemplo, si quieres comer una hamburguesa, siempre puedes comprarla en Hesburger. Siguiendo el apartado gastronómico, el restaurante Goodwin The Steak House puedes hallarlo tanto en Helsinki como en la capital de Estonia. Y para alojarte tienes opciones como Sokos, cuyos dueños son, adivina, finlandeses. Para rematarlo, el quiosco R-Kioski se ha ganado un hueco en la ciudad Tallin, aunque su marca allí no tiene la i final.

Estas no son las únicas comodidades de los turistas finlandeses en Estonia. Los carteles en su idioma o que el personal de servicios se dirija a ellos en su lengua son algunas de las formas para tenderle la alfombra roja a estos visitantes. Ya sabrás que inicialmente muchos de ellos venían atraídos por su alcohol más barato -ahora ya no tanto-, aunque la idea de visitar un país extranjero y el mismo día volver a casa acabó de convencerlos.

LEER MÁS | Así es el trepidante crucero de Helsinki a Tallin

Viendo esto, uno descubre que la mejor forma de estar en Finlandia sin estar en Finlandia es ir a Tallin. O a la localidad española de Fuengirola, que también cuenta. ¿Ya te has fijado en los detalles que cuento en tu visita por Estonia?