¿Quién fue el genio que decidió crear una taza que no se puede meter en el lavavajillas? Tal vez no podamos precisar la persona que lo hizo por ser un objeto tradicional, inventado cuando eso de meter los platos en una máquina para que se laven solos parecía obra de brujos. Me estoy refiriendo, por si aún no lo has pillado, al kuksa.
La culpa de esta taza, tan bonita como poco práctica en cuanto a la limpieza, es de los samis, el pueblo que se asentó en la zona más septentrional de Europa, más concretamente en Laponia. ¿Quieres saber más sobre el kuksa? Ya te adelanto que también tiene grandes ventajas su uso.
Lo primero que tienes que saber es que un auténtico kuksa (guksi para los samis) está hecho con el nudo de un abedul. Así lo indica la tienda online Handmade of Wood. Es cierto que se puede fabricar con diversos materiales, como madera de pino, pero aquí lo que manda es la tradición.
También te digo que el kuksa original es potencialmente más caro, pues los nudos escasean en los abedules. Muchos fabricantes, conocedores de esta circunstancia, optan por otras materias primas. El resultado, un producto más asequible para el turista que visite Laponia u otras regiones de Finlandia y quiera llevarse un souvenir. Para que tengas una referencia, el nuestro -precisamente una variedad más económica- nos costó unos 10 euros.
LEER MÁS | Conoce ya las costumbres finlandesas de andar por casa
Si no lo puedo enjuagar, ponerle detergente y tampoco meterlo en el lavavajillas, ¿qué tengo que hacer para limpiarlo? ¿Lo dejo tal cual para que coja mugre y se pudra? Tengo buenas noticias: hay una solución. Sigamos estas instrucciones:
- Vierte café en el kuksa y deja que repose un par de minutos para que desaparezca su sabor salado, entre otras cuestiones.
- Retira el café y deja que la taza se seque durante dos horitas.
- Ahora utiliza tres cucharaditas de posos de café calientes y húmedos. Las tienes que distribuir con tus propios dedos en el interior del recipiente.
- Finalmente debes retirar los posos después de que hayan penetrado en las fibras de la madera. Si el fondo queda negro, significa que has cumplido tu objetivo, aunque parezca mentira.
Quitar el sabor del kuksa
Si consideras que el sabor que ha quedado es aún algo salado, vuelve al punto uno. Y si sencillamente no es de tu gusto, el consejo que dan es humedecer el kuksa con el licor que quieras. Lo sé, es algo laborioso, pero también la forma de evitar que tu taza acabe por agrietarse y quedar hecha trizas.
Hay aún otra solución, un poco cutre, pero realmente práctica. Recuerdo en mi paso por la mina de amatista de Luosto nos obsequiaron con un rico zumo servido en un kuksa… con un vaso de plástico en su interior. Así te aseguras que no tienes que limpiar la taza, porque total, nunca se ensucia. Y con los visitantes que tendrán creo que puede ser pesado lavarlos uno por uno.
Sabiendo que no se puede limpiar como un recipiente normal, ¿por qué la gente aún lo compra? Pues porque es muy práctico para cuando vas de excursión, por ejemplo. Lo puedes llevar tranquilamente en tu mochila (o en tu cintura) sin que se rompa. Además, la madera es un mal conductor, lo cual implica que no te quemarás las manos cuando estés tomando un insulso café finlandés.
LEER MÁS | La historia de la rara frontera en la isla que comparten Finlandia y Suecia
Hay gente que en vez de comprarlos prefiere hacerlos a mano. Y tú, ¿eres de esos o también lo has adquirido en algún comercio? Tus comentarios sobre el tema, como siempre, serán bienvenidos.
Hola Michan, me ha encantado tu artículo y me ha servido de ayuda para saber más sobre la taza kuksa.
Mi intención es fabricarme una a mano, pero tengo una duda sobre qué tipo de madera utilizar. He estado buscando donde conseguir un taco de madera de abedul de medidas adecuadas y lo que he encontrado me ha parecido muy caro. Creo que practicaré con otro tipo de madera, alguna que encuentre en mis salidas por la montaña y, cuando adquiera experiencia, atreverme con el taco de abedul.
¿Te quería preguntar si el ritual del café lo puedo utilizar con cualquier tipo de madera o es específico para el abedul?
Y otra cosa, después del tratamiento con el café, ¿cómo se conserva la taza? ¿Es decir, después de beber en ella, agua, té, café o licor, se debe limpiar de alguna manera especial o solo se enjuaga y listo?
Muchas gracias de antemano.
PD. ¿Para cuándo un artículo sobre los cuchillos puukko?
Hola, muchas gracias por tu comentario. Pues mira, tekio, si no puedes encontrar nada de abedul, puedes optar perfectamente por el pino. No es lo mismo, obviamente, pero seguro que te queda algo decente.
En cuanto a lo del café, para cualquier madera supongo que servirá igual. Ten en cuenta que lo que se hace con los posos es lo que sustituye a la limpieza habitual. Nunca hay que hacerle ningún otro tratamiento para limpiarlo, ni siquiera enjuagarlo. Así consigues alargar su vida al máximo. Si lo prefieres, a ver, puedes barnizarlo con ganas, utilizar algún tipo de funda impermeable o el cutre vaso de plástico, claro que de esta forma pierde su gracia.
Me apunto lo del puukko, gracias por la sugerencia 🙂 .
¡Saludos!
Las kuksas suelen hacerse de madera en verde, es decir antes de secarse. Así la madera es más blanda para trabajarla correctamente. Para que durante el secado no se nos agriete debemos tomar unas precauciones: deberá hacerse de un tronco abierto en forma de «quarter sawn» (buscad en google), quitarle la parte central más oscura (1 o 2 cm) y plantear la abertura en el lado donde estaba la corteza. Es tambien importante la dirección de la veta de la madera, hay que situar el mando orientado en la dirección de la veta, de esta forma las zonas de testa que son más difíciles de trabajar quedan situadas en lugares más apropiados.
Otra consideración importante: usad madera dura, es decir, ni pino ni aveto, usad arce, algarrobo, olivo, almez, fresno, haya, cerezo, castaño, etc… La madera de coniferas tiende a agrietarse más. No recomiendo el roble al tener el poro tan abierto absorberá los líquidos y con el tiempo puede enranciar y tomar sabores.
A veces la kuksa se seca correctamente y al vertir liquido caliente se agrieta. Os podéis imaginar que cuando eso pasa es una sensación terrible. Los consejos que doy arriba minimizan mucho esta posibilidad. Además tened en cuenta que si trabajáis con hacha y azuela antes de cuchillo y gubias deberéis tener mucho cuidado ya que un golpe en el bol puede causar una micro-grieta que luego crezca. Otro buen consejo es trabajar rápido (1 día máximo para llegar al grosor final), tallar las paredes con un grueso uniforme y secarlas lentamente dentro de una bolsa de papel durante unas 3 o 4 semanas.
Sobre el acabado: aceites de uso alimentario. Solo recomiendo los siguientes ya que no se enranciarán: lino, nuez, cáñamo. No uséis aceite de oliva o girasol, con el tiempo enranciará. No uséis aceite de linaza de la ferreteria ya que contiene secantes tóxicos. Los encontraréis en dietéticas. Podéis usar el conocido aceite mineral del ikea para tablas de cortar aunque es un derivado del petróleo es alimentario, eso si, su efecto dura poco y deberéis ir dándole segun el uso. Con los aceites que os recomiendo no deberíais tener que volver a poner en muchos años si dejéis que sequen totalmente (varias semanas). Hay quien usa cera de abeja con aceite pero la cera se fundirá si ponéis bebidas calientes.
Lo de las kuksas es un mundo. Los que más saben del tema, son seguramente Alex Yerks y Paul Adamson, buscadles en redes sociales y en la web y encontraréis mucha información.
Este no es el proyecto más sencillo, yo recomiendo empezar por hacer espátulas, cucharas, y otros elementos más simple de tallado de madera verde (green woodcarving).
Caray, qué de información útil. ¡Muchas gracias por tu aportación! 😀
¡Saludos!
Muchas gracias por la información, coincido con el compañero. Muy útil. Una pregunta, conviene hervir la taza con sal. Si es así, que proporción de agua y sal?. Cuanto tiempo de cocción?. Se le podría dar cera de abejas por el exterior, la protegería y al no estar en contacto con los líquidos no se fundiría ?.
Gracias de antemano, saludos.
No soy experto, pero por la información que tenemos sobre la mesa yo no pondría a hervir la taza. Y lo de la cera, yo no le veo sentido ponerla por fuera, ya que al fin y al cabo el punto crítico es justamente por dentro.
Saludos.
Vaya que si es todo un reparto tal mantenimiento de la kuksa
Acá en México hay algo ligeramente parecido con las cazuelas de barro y se “curan” con vinagre, sal o ajo para desaparecer cualquier sabor a barro o como bien haz dicho soportar altas temperaturas o que no se agriete con detergente al momento de lavar
Por mi parte solo las prefiero para tomar agua , herencia de mi madre y es lo mejor para soportar otro tipo de altas temperaturas ☀️☄️😄
Así que ya vez, es otro tipo de kuksa mexicana. ¿Aún tienes la tuya?
Saludos como siempre.
Sí, aún la tengo en casa, aunque la utilizamos más como objeto de decoración que otra cosa. Pero bueno, ahí está, por si tenemos que hacer excursiones o algo 🙂