Porvoo es mucho más que su casco antiguo. Más allá del centro, hay lugares que los turistas no suelen visitar. Eso sí, la población local sí que los aprecia y acude a estos a menudo. Es el caso de la fábrica de arte o Taidetehdas.
Sin duda, este es un sitio ideal para descubrir artistas finlandeses actuales. Pero realmente es mucho más que un museo de arte: es todo un centro donde reunirse con la familia, comer en alguno de sus restaurantes… e incluso mirar una película. Entremos y descubramos lo que este lugar nos ofrece.
La fábrica de arte de Porvoo es de los pocos sitios donde verás un ‘árbol’ dentro de un edificio. Es de las obras más llamativas y de las primeras que te encuentras nada más entrar. No son más que trozos de corteza unidos a una columna, pero no deja de ser curioso.
Al lado del árbol podremos descubrir las exposiciones artísticas que nos esperan. La primera que nosotros pudimos presenciar es la de Harri Leppänen, escultor y pintor finlandés que murió de forma prematura en 2017 a los 65 años. A la hora de elaborar sus creaciones, Leppänen se inclinaba por un estilo abstracto. Cuando observes sus esculturas, muévete, pues él tiraba de un juego de perspectivas muy interesante.
LEER MÁS | ¿Ya conoces la casa-museo del famoso poeta Runeberg?
En este caso se trataba de una exposición temporal, pero hay otra permanente.
Exposiciones en la fábrica de arte de Porvoo
Quien fuera director de la editorial WSOY, Yrjö A. Jäntti, donó más de mil obras de su colección a la ciudad en 1984, un año antes de su muerte. Poseía más de mil creaciones de artistas locales, entre los cuales se hallan Juhani Linnovaara, Åke y Karin Hellman y Stig Fredriksson. Ni idea, ¿verdad? Tranquilo, ya los descubrirás cuando vayas a la exposición.
En este caso, las obras -de los siglos XIX y XX- son variadas. Van desde los retratos hechos aparentemente a lápiz hasta pequeños bustos, pasando por pinturas de diferentes corrientes. En definitiva, aunque el espacio sea pequeño, la variedad es manifiesta.
Yendo ahora a la parte arquitectónica, este edificio presenta algunas peculiaridades que tal vez te atraigan. Si bien la entrada es meramente convencional y podría asemejarse a cualquier bloque de pisos, una vez entras te das cuenta de que hay una zona completamente diferenciada. Sus paredes, con ladrillos rojizos, dan la sensación de que te estás adentrando en una construcción distinta. Curioso, cuanto menos.
¿Qué más encontrarás?
Dejando de lado la zona artística, el Taidetehdas de Porvoo posee numerosos espacios para organizar eventos. En este sentido, los conciertos toman protagonismo, aunque también se pueden montar congresos allí mismo.
Por si esto fuera poco, como allí están las oficinas del departamento de Turismo de la ciudad, en la fábrica de arte también se ubica un punto de atención turística. Si buscas folletos para orientarte por Porvoo, puede que sea un buen sitio para parar antes de ir al casco antiguo.
LEER MÁS | Más sobre Porvoo: la fábrica de dulces de Brunberg
Este también es un lugar para comer. En total aloja tres restaurantes, con lo que tendrás de sobra para elegir. Asimismo, si después quieres ir al cine, tienes una serie de salas para ver las películas que tengan en proyección.
Como ves, la fábrica de arte de Porvoo es todo un lugar polivalente donde hacer lo que quieras. Y espera, no te he dicho lo mejor de todo: el acceso es gratis. No tienes nada que perder por hacer una visita a Taidetehdas, ¿no?