Si vas a Hämeenlinna, no tienes otra opción que pasar por el castillo de Häme (Hämeen linna). Es el símbolo de la ciudad, así como el edificio histórico que ha visto evolucionar la ciudad prácticamente desde sus inicios.
Solo el hecho de caminar por fuera entre sus muros ya impresiona. Esas paredes rojizas le dan un carácter especial a este lugar, ubicado justo al lado del lago que divide Hämeenlinna. ¿Te animas a conocer este lugar histórico de Finlandia?
El castillo de Häme está localizado en una población que en su tiempo era un punto estratégico comercial. Formaba parte de una ruta que atravesaba el país de este a oeste, lo que le confirió ese estatus a la ciudad.
La construcción de Hämeen linna se inició hacia el año 1308, cuando el castillo es mencionado por primera vez en fuentes escritas. En aquellos momentos no era más que un fuerte de madera rodeado por un muro de piedra. Como curiosidad, en sus inicios se asentaba sobre una isla. Sin embargo, con el paso de los años acabó por desaparecer y se unió a la orilla del río.
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No fue hasta finales del siglo XIV cuando se levantó la construcción de piedra. Se utilizó ese ladrillo rojo tan característico, como el que vemos ahora. Se puede considerar que entonces era un castillo lujoso, pues ese material era muy caro en esa época. Estaba a la altura de la gente que vivía allí: la nobleza. A su vez, debía haber una serie de empleados que también gozaban de un salario más que aceptable.
Por desgracia, el castillo de Häme también ha sufrido algunas desgracias. Un ejemplo es el incendio de 1659, que destruyó todo lo que era madera. Además, fue el objetivo del Imperio ruso, que se encontró una oposición nula. Se rindieron pacíficamente, sin iniciar ataque alguno, dos veces. Luego, cuando Finlandia pasó a ser un Gran Ducado autónomo de Rusia, se convirtió en una cárcel. Lo fue desde 1841 hasta 1953, año en el cual se inició una reconstrucción para dejarla como estaba hace siglos y abrir la construcción como museo en 1979.
Dentro del castillo de Häme…
Dicho todo esto, ¿qué te encontrarás en el museo? Una de las cosas que me hizo gracia fue el hecho de tener expuestas unas armaduras y que nos las pudiéramos probar. ¡Anda que no cayeron fotos! Aunque yo simplemente me puse el casco, que ya es suficiente. También me llamó la atención que hubiera un juego para disparar con una ballesta que en realidad era un mando de la Wii. No iba muy fino, o puede que fuera yo que no sabía manejarlo.
También debo decir que tiene un patio interior que desde el punto de vista del diseño me pareció fascinante. Las paredes estaban cubiertas por motivos que rompían la monotonía habitual. De la misma forma, me gustó subirme a una de sus torres y contemplar las excelentes vistas sobre Hämeenlinna y los alrededores.
Lo cierto es que el interior de castillo no tiene mucha cosa que ver, así que no recomiendo visitar eso en exclusiva. Aunque tengo que admitir que hay elementos arquitectónicos interesantes que solo se ven desde dentro, la exposición del museo es más bien pobre. En parte entiendo que se conserva poca cosa de la época medieval porque antes de ser una atracción turística se utilizó como cárcel. Seguramente si vas con un guía el paseo te resultará más productivo.
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En cualquier caso, se trata de un punto histórico que desde luego que deberías conocer. Mi consejo es que compres el ticket doble: para entrar al castillo y el museo Militaria. Este último sí que resulta más interesante por su contenido. La cuestión es que ese billete te sale bastante más económico (12,5 euros frente a los 10 euros solo para Hämeen linna), por lo que de esta forma sí que vale la pena descubrir ambos sitios. Recientemente han abierto la prisión a modo de museo, así que tal vez te interese saberlo.
Si ya has estado en el castillo de Häme y su museo, déjanos tus impresiones aquí abajo. ¡Nos leemos!