Helsinki es una ciudad que destaca por muchos aspectos, como que sea una capital amigable para quienes quieran visitarla a pie o en bici. Sin embargo, hay otro que tal vez hayas obviado al visitar la zona. Estoy hablando del tema de la limpieza.
Cuando un sitio está impoluto -o hay poca basura por el suelo-, uno a veces lo pasa por alto. «Es lo que toca», pensarán algunos. La cuestión es que si quieres explorar un lugar y te lo encuentras con suciedad en el suelo, lo acabas notando y tu opinión del viaje tiende a ir a la baja. Esto no te sucederá en Helsinki.
Para avalar lo que estoy diciendo, he acudido al portal de datos abiertos de la Unión Europea. Uno de los datos que manejaba era el de una encuesta de satisfacción entre la población. Tomándome los sondeos como lo que son, simples entrevistas a ciudadanos con cierto margen de error, las cifras que dan son ciertamente positivas.
El 80% de ciudadanos de Helsinki se declara satisfecho por la limpieza de la ciudad. Es un porcentaje alto comparándolo con el 36% de Lisboa, el 38% de Madrid o el 9% de Roma. De la capital italiana, unos amigos me comentaban que la habían visitado y que la encontraban muy sucia, lo cual explica este resultado.
LEER MÁS | ¿Es posible visitar Helsinki solo en un día?
Pero, ¿es Helsinki la ciudad más limpia de Europa? No, pero creo que nos podemos conformar. Los ciudadanos de Oviedo y Luxemburgo son los que la perciben más pulcra: un 95% dijo sentirse satisfecho con esta cuestión. Oulu también está bien posicionada, con un 85% de la población mostrándose conforme.
¿Por qué Helsinki está tan limpia?
¿Cómo se puede explicar que estas dos urbes finlandesas saquen notas destacables entre sus ciudadanos? Es importante que para que las ciudades, hablando de Helsinki y cualquiera en general, no parezcan una pocilga los mismos habitantes se involucren. Es decir, un poco de civismo. Eso significa no ser un cerdo y no tirar la basura al suelo. Te pongo un ejemplo.
Como mi abuela vive en Korso, siempre vamos allí a pasar unos días con ella. Este pueblo, a media hora de Helsinki, no es que sea muy grande, pero tiene los servicios más que necesarios para la población. Pero hay una cosa que le falta. Me refiero a recursos de limpieza. Allí no pasa el barrendero ni cada día, ni cada dos días… Siempre hay algún guarro que lanza el tetra brik de zumo y se puede quedar el envase exactamente en el mismo sitio durante varias jornadas. Sin embargo, eso no llega a convertirse en ningún basurero ni nada por el estilo.
Eso no es lo único. ¿Sabes que en Finlandia hay un sistema de retorno de envases? Latas y botellas de plástico -y alguna de cristal- tienen un depósito de entre 10 y 40 céntimos y cuando las devuelves en la tienda, te dan un ticket por su valor. Además de promover el reciclaje, esto evita que las veamos a montones en la calle. Si alguien tira una al suelo, alguien la recoge. Lata a lata, acabas por conseguir un buen dinerito para comida.
¿Dónde están los cubos de basura?
Después hay otro tema que particularmente me ha llamado la atención. En Helsinki no es muy habitual ver esos grandes y antiestéticos cubos de basura por la calle. De los pequeños y pegados a una farola sí que hay, pero de los otros no. Y eso no solo ocurre en la capital: en el pueblo de mi abuela, solo hay un espacio en un aparcamiento con varios recipientes.
¿Dónde tiran la bolsa de la basura? Normalmente cada comunidad de vecinos -o cada vivienda- tiene un espacio con varios cubos de desechos y reciclaje. Estos los tienen que pedir y después cada poco tiempo viene un camión a recoger todo lo que haya. Realmente es un método cómodo para la ciudadanía.
LEER MÁS | Pasar unas vacaciones en Helsinki con niños
En fin, después de explicarte eso entenderás un poco mejor por qué Helsinki es una ciudad que luce tan limpia. Y tú, ¿te habías dado cuenta de esto? Esperamos tus opiniones aquí abajo.