Todo un icono reconocido a nivel mundial. La sauna finlandesa hace años que ha llegado a todos los rincones del planeta. Es posible que no hayas pisado Finlandia, pero sí que hayas disfrutado de una sauna. ¿Pero son iguales a las que puedas encontrarte en el país nórdico?
Aquí te contamos todo lo que tienes que saber sobre la sauna finlandesa: qué es, beneficios, consejos, códigos de conducta… Con toda la información que te brindaremos en este post, estarás preparado para descubrir esta faceta tan relevante de Finlandia.
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Sauna finlandesa: qué es
Alguna vez me han preguntado qué es la sauna, si algún tipo de ducha o cómo. Ciertamente, no se puede desvincular con la higiene personal, pues al fin y al cabo es una práctica que está ligada.
La sauna finlandesa como todos la conocemos es básicamente una sala con las paredes de piedra y con aislamiento para que el calor no se escape. Dentro siempre encontramos una estufa con unas piedras a las que se les va echando agua y el banco de madera para sentarnos. Esto sirve para calentarlo y hacer que la temperatura se dispare.
Para los finlandeses, la sauna es mucho más que un lugar para lavarse el cuerpo. Es un ritual de socialización. De hecho, está mal visto rechazar una invitación a la sauna, a no ser que tengas motivos de peso. Incluso muchas veces se dice que las decisiones más importantes de Finlandia se toman desnudos a 80 grados.
Como curiosidad, te contaré que antiguamente se utilizaba la sauna en caso de emergencia para los partos. En efecto, había bebés que nacían en estos sitios, pues higiénicamente era la mejor opción. Y no estoy hablando de algo que se hacía cuando aún no existía ni la rueda, sino de algo que aún ha venido ocurriendo hace unas décadas.
Beneficios de la sauna
Los beneficios de la sauna finlandesa son numerosos. Se ha demostrado que puede mejorar tu salud, por lo que tenemos motivos suficientes para probar esta experiencia y repetir. En la web especializada Sauna from Finland recogen algunos de los puntos más importantes:
- Corazón: uno de los beneficios de la sauna finlandesa es que mejora la circulación sanguínea. Así pues, se reduce la posibilidad de sufrir un accidente cardiovascular.
- Cerebro: tomar una sauna revigoriza este órgano, por lo que baja la posibilidad de padecer enfermedades como el Alzheimer o de sufrir un ictus.
- Sistema inmunitario: combinar la sauna con bañarse en un lago helado, por ejemplo, mejora notablemente tus defensas. Por supuesto, funciona a modo preventivo, no cuando estás ya enfermo, pero de todas formas es interesante tomar nota.
- Sistema respiratorio: ¿tienes asma? Pues que sepas que con la sauna puedes notar que respiras mejor. ¡Conviene probarlo!
- Relax: los demás beneficios de la sauna finlandesa no los notarás al momento, pero sí que te darás cuenta de lo mucho que relaja. Es lo mejor después de volver de un día estresante. Además, luego acabas durmiendo como un bebé.
Cómo funciona la sauna finlandesa
Para los novatos, explicaré cómo funciona la sauna finlandesa. Las eléctricas no tienen mucho misterio, solo hay que darle a un botón y esperar a que se caliente. Después están las de leña, que ya requieren de una mayor atención por el tema de echar madera constantemente para mantener el fuego. Y para colmo, luego están las de humo (savusauna), en las que el humo se queda en la misma sala. A grandes rasgos, esos son los tres tipos de saunas que existen.
En cualquier caso, la gracia consiste en sentarse y echar agua a las piedras que hay encima de la estufa (las llaman kiuauskivet). De esta forma, se genera un vapor (löyly en finlandés) y esto provoca esa sensación de calor intenso.
Tradicionalmente, en la misma sauna se solía calentar agua para bañarse. De hecho, en alguna más antigua se puede observar esa función. Se saca el agua caliente de la estufa y se mezcla con la del lago. De esta forma, uno se ducha sin pasar frío ni quemarse. Esto es muy típico de las cabañas de verano (mökki), pues muchas veces no llega ni la luz ni las tuberías.
Hoy en día ya la mayoría de saunas tiene la ducha a la salida, por lo que primero pasamos a disfrutar de ese momento de calor y humedad y después nos aseamos.
Temperatura
El tema de la temperatura es fundamental. Se puede considerar que hace frío si dentro de la sauna tenemos menos de 70 grados. Una vez me encontré con una a 50 grados y salí a buscar la chaqueta (real). Lo ideal es que esté a unos 80-90 grados. Si sube hasta los 100 grados o más, ya empieza a ser insoportable.
Con las saunas modernas eléctricas no hay ningún problema con el tema de la temperatura, pues es darle a un botón para que se encienda y listo. En cambio, las tradicionales de leña requieren de mayor atención para que no se apaguen y que mantengan una temperatura ideal.
Pero en realidad no es solo cuestión de que haga el calor suficiente. También tiene que ver que las piedras de la estufa estén en buenas condiciones, pues con el tiempo se van degradando. Eso implica que el vapor no es de la misma calidad, por lo que ese estallido de calor al echar el agua no es el mismo. Por supuesto, aquí también entra en juego el estado de la misma estufa.
Consejos
Los básicos sobre las saunas en general ya los tienes. Ahora solo falta que conozcas una serie de consejos y buenas prácticas.
Lo primero: lo normal es ir desnudo. Así es como lo hacen en Finlandia. A ver, cada familia tiene su libro de estilo e incluso es posible que algunas admitan el bañador, pero lo común es entrar sin ninguna clase de ropa. Sin embargo, no creo que nadie se vaya a quejar si entras con traje de baño. En las saunas públicas más turísticas, esas que tienen piscinas y todo en el exterior, sí que es posible que más personas opten por taparse sus partes íntimas.
Lo que sí hay que llevar siempre es una toalla. Y no precisamente para taparse. Los bancos de madera están muy calientes y necesitas cubrirlos con algo para poder estar medianamente cómodo (y no quemarte las posaderas). Además, tengo entendido que también se utilizan por una cuestión de higiene.
Hay otra cosa que aún no te he contado y que también forma parte de la tradición. El llamado vihta o vasta en finlandés es un ramo hecho con ramas de abedul. ¿Cuál es su función? Pues sirve para darnos golpes por todo el cuerpo. Sí, suena algo feo, pero dicen que sirve para reactivar la circulación sanguínea. Además, aporta ese aroma tan característico a la sauna finlandesa.
Precisamente el vihta contribuye también a esta experiencia sensorial a través del olfato. Porque hemos hablado de ese bochorno agradable, la relajación, pero de la misma forma la sauna implica apreciar los olores. El del ramo mismo en agua mojada desprende un aroma muy característico y natural, pero hay más. Hay gente a la que le gusta poner líquidos aromáticos al agua para tirar sobre las piedras o directamente echar cerveza. Esta última opción te hará creer que alguien está haciendo pan por eso de la cebada.
Hablando de cerveza, ¿qué hay sobre la bebida? Al fin y al cabo, en la sauna se pierden muchos líquidos. Mucha gente opta por llevar una bebida refrescante a la sauna, aunque yo soy más de hacer un descanso y tomármela fuera. Imagínate una tarde cálida de verano en una terracita nada más salir mientras la brisa refresca tu cuerpo y estar con una lata de cola en la mano o un vaso de zumo frío. Es una sensación insuperable. Y en invierno, bueno, lo gracioso puede ser aguantar las temperaturas negativas del exterior.
Vivir ese contraste de temperatura también es parte importantísima de la experiencia. Primero a 80 grados y segundos después, a -10 y sumergidos en un lago o revolcándonos en la nieve. Ojo, nunca metas la cabeza dentro del agua, no es nada recomendable. Y, además, es una práctica saludable, tal y como explicábamos antes.
En verano ya no se nota tanto ese contraste térmico, pero igualmente un chapuzón en el lago sigue siendo un plan apetecible. La sauna finlandesa no va solo de pasar calor en invierno, sino que va mucho más allá: es un modo de vida. Incluso en la época estival, muchas personas siguen tomando una sauna a diario. ¡Y que nadie se lo quite!
Llegados a este momento, debo hacer una puntualización sobre las saunas. Esto no va sobre aguantar lo máximo posible en las condiciones más extremas posibles. Si solo aguantas cinco minutos, está bien. Puedes hacer un pequeño descanso y volver si así lo deseas. Procura no salir nada más echen vapor, pero aparte de eso puedes salir cuando quieras.
En fin, con todo lo que te he contado ya puedes hacerte una idea de todo lo que significa la sauna finlandesa. Ahora es tu turno de contarnos tus experiencias. ¿Cuántas veces has estado en una sauna? ¿Te parece ya algo imprescindible? ¡Cuéntanoslo aquí abajo!