Hanko, la encantadora ciudad más veraniega de Finlandia

Lo creas o no, en Finlandia también hay destinos que se venden como de sol y playa. No es el Mediterráneo, sino el mar Báltico. Y el punto en concreto del que hablaremos aquí, Hanko, la población más meridional de la parte continental del país.

Hanko es una pequeña ciudad ciertamente nueva, pero tiene su encanto para pasar uno o dos días en verano. Vamos a enseñarte qué puedes hacer en esta población costera. Tal vez hasta vuelvas a casa con un bronceado que no esperabas obtener.

Información sobre Hanko (Finlandia)

Como decía, Hanko tiene una historia relativamente corta, que se remonta a 1874, año de su fundación. Sin embargo, ha sido el centro de atención en numerosas veces, como cuando pasó a formar parte de la URSS temporalmente en los años 40 por ser un punto estratégico. Sin embargo, también ha atraído a visitantes por numerosos motivos en verano, entre otros los balnearios que vieron los primeros turistas.

Lo que buscamos en un destino de playa es que básicamente haga buen tiempo, ¿no? Que las nubes no molesten, que haga calorcito… Todo esto es muy relativo y nada comparable con los destinos del sur de Europa, pero de todas formas tienen su atractivo.

La cuestión es que parece que hay bastantes ciudades finlandesas que se proclaman como las más soleadas del país, entre ellas Hanko. Lógicamente, solo una puede serlo, pero no hay datos que certifiquen cuál es. El Instituto finlandés de meteorología explica que es imposible saberlo, porque no en todas las estaciones se miden las horas de sol. Pero sí dan una clave: en la costa hay menos nubosidad que en puntos de interior.

Pero además de la playa, que a lo mejor a nosotros no es lo que más nos interesa, Hanko tiene otras cosas chulas que podemos explorar. Hay una arquitectura muy interesante, en especial en lo que se refiere a las villas, y mucho trasfondo histórico que podemos descubrir.

Qué ver en Hanko

Sí, Hanko se vende como un destino de playa y presumen de los kilómetros de arena que tienen, pero hay más que ver. Repasemos algunos de los puntos que podrás descubrir en la ciudad.

Vesitorni, la torre del agua

Una de las insignias de la ciudad es Vesitorni, la torre de agua. Se construyó en 1943 ante la necesidad de una nueva torre tras la destrucción de la que había por la guerra.

Obra del arquitecto Bertel Liljeqvist, en la actualidad sirve de torre de observación, lo que pasa es que hay que pagar entrada para acceder. Eso sí, las vistas deben de ser preciosas, porque además se encuentra en una ubicación clave. Por si no quieres sacar los billetes, te enseñaré más adelante otra torre, pero gratis.

Iglesia de Hanko

Justo al lado de Vesitorni se encuentra la iglesia de Hanko. La levantó el arquitecto Jacob Ahrenberg en 1892. Tiene una historia un tanto curiosa, al estilo Calatrava. Cuando se construyó, presentaba una imagen rojiza, pero al parecer hubo algunas deficiencias en las obras y las inclemencias meteorológicas hicieron mella en este edificio, así que tuvo que reformarse en los años 50.

Esa imagen más moderna y minimalista es fruto de esa reforma. Desde luego, la imagen exterior de la iglesia resalta en lo alto de esta colina. Por dentro, esta tendencia se mantiene y ya no destaca tanto ante la carencia de muchos detalles. Aun así, no deja de ser un punto que debamos admirar.

Museo de Hanko

Nos vamos justo detrás del puerto para descubrir el museo de Hanko, ubicado en una preciosa casa de piedra. Es un pequeño centro cultural en el que suele haber siempre diferentes exposiciones. Merece la pena pasarse y tener ese pequeño rato intelectual, o como quieras llamarlo.

Cuando fui, me encontré con una exposición de pósteres turísticos de Finlandia, un paseo por la historia de la promoción del país. Lo sé, puede sonar raro y aburrido, pero créeme si te digo que me sorprendió positivamente. ¡Ya nos dirás qué hay cuando tú vayas!

Puerto

El puerto deportivo de Hanko es una de esas zonas vivas de la ciudad donde puedes pararte a tomar algo en sus terrazas y disfrutar de las vistas al mar. También he de decir que mola mucho que todas las casetas estén pintadas de color rojizo.

Para pasear se nos queda corto, porque de un lado al otro no hay más de un minuto, pero no deja de ser una zona agradable.

Villas y edificios clásicos

Una de las cosas que más me molan de Hanko son sus villas y edificios clásicos. Los más antiguos datan de finales del siglo XIX, en consonancia con la antigüedad que tiene la ciudad en sí.

Uno de los edificios más importantes fue Hangon Casino, construido en 1910. A pesar del nombre, no, no fue ningún casino. Funcionaba como hotel del que fue uno de los balnearios más importantes del norte de Europa hasta la primera guerra mundial. Ahora mismo sirve como restaurante.

Al lado de Hangon Casino encontramos Villa Frenckell, levantado allá por 1880 aproximadamente, que servía a dicho balneario. Si seguimos nuestro camino por las calles de la ciudad, nos toparemos con ejemplos bellísimos como Villa d’Angleterre, Villa Margita o Villa Elisabeth. Para mí, es lo más valioso que tiene Hanko.

Camino del amor

Entre todas estas cosas que hemos visto, sí, también hay un camino del amor (rakkauden polku). Sinceramente, la persona que se inventó el nombre debe de ser menos romántico que yo, a no ser que ahora pasear entre cañones de hace 80 años lo sea. En fin, ya me lo aclararéis.

El caso es que esta es una zona histórica con una serie de baterías de costa que se emplearon contra el ejército soviético en los años 40. Pero además de esto, es un área verde de esas características de las poblaciones finlandesas. Estás en la misma ciudad, pero a la vez con la sensación de estar en pleno bosque. Eso sí que mola. Y las vistas al mar desde las rocas también son estupendas.

Kuningatarvuori

Antes dije que te iba a enseñar una torre de observación con buenas vistas y gratis, ¿no? Pues es esta, la de Kuningatarvuori. Desde allí tendrás a tus pies el puerto deportivo y podrás ver toda la ciudad. Está muy bien ubicado y podrás llegar sin problemas subiendo las escaleras.

Justo allí hay un aparcamiento público, también gratuito, donde puedes dejar el coche si utilizas este medio de transporte para llegar a Hanko.

Playas

Y sí, Hanko son playas. La ciudad presume de tener varios kilómetros en sus alrededores para bañarse en las aguas del mar Báltico. Quien se haya atrevido a darse un chapuzón en pleno julio, se habrá dado cuenta de que la temperatura, en fin, es la justa para poder nadar sin congelarse. Depende de la zona y las corrientes, entre otras cosas, pero no está mal como experiencia.

El agua del Báltico es notablemente menos salada que la del Mediterráneo, por ejemplo. Y en parte creo que se agradece, porque la sensación que se te queda después es casi como si te hubieras metido en un lago. ¡Cuéntanos si te animas a bañarte en Hanko o no!

Cómo llegar a Hanko

Si vas a Hanko desde Helsinki, puedes prepararte para un buen viaje. La distancia que las separa es de unos 120 kilómetros. Si hubiera autopistas, en una hora se podría llegar, pero mucho me temo que la mayor parte del trayecto es en carreteras convencionales.

Calculo que si vas en tren, en algo más de una hora podrás llegar fácilmente, mientras que en coche se necesitan algo menos de dos horas. Como siempre, el bus es otra opción, pero suele ser más caro que el tren y tarda más de dos horas.

Dónde dormir

¿Buscas hoteles donde alojarte durante un par de noches en Hanko? Pues aquí te lo ponemos fácil. Hemos buscado por Booking cuáles son las mejores opciones y aquí te las traemos:

• Alojamiento mejor valorado: Graniitti
• Hotel más barato: Hotel Bulevard
• Hotel más cercano a la playa: B&B Villa Aurora

Llegados a este punto, nos gustaría leer tu opinión sobre la ciudad. Si tienes algún lugar que te encante y no hayamos mencionado, se agradecerá conocerlo. ¡Nos leemos!